El hockey es uno de los deportes que más está creciendo en los Países Bajos. Con más de 180.000 participantes, el hockey es el segundo deporte de equipo de los Países Bajos después del fútbol. Las lesiones en el hockey se producen principalmente a consecuencia del contacto con otros jugadores, la bola, el palo y el campo. Las lesiones de hockey más frecuentes son de tobillo, rodilla, dedo/pulgar, isquiotibial, espinilla, muslo y cara.

Tobillo
La lesión más frecuente en el hockey son los esguinces o torceduras de tobillo. En la mayoría de los casos, la lesión se produce tras aterrizar con la parte externa del pie, doblándose demasiado la planta hacia adentro. En la parte exterior del pie, la cápsula, los ligamentos y los nervios pueden sufrir daños a causa de la hiperextensión. En el interior, el cartílago puede dañarse por la excesiva compresión. En función de la gravedad de la lesión, el tejido del exterior está estirado o desgarrado. Este daño provoca una hemorragia en el tobillo. En consecuencia, se hincha, aparece un hematoma (pasado un rato) y empieza a doler.
El tejido dañado se cura de forma natural del mismo modo que una herida en la piel. Sin embargo, el músculo y la fibra nerviosa no recuperan automáticamente su funcionamiento original. El músculo y la fibra nerviosa deben ser entrenados. Esto se puede hacer con sencillos ejercicios de equilibrio. Además, hay que proteger el tobillo para evitar el riesgo de recurrencia. Una tobillera Push Sports es una excelente solución.
Una medida importante y sencilla para reducir el riesgo de lesión de tobillo es retirar del campo las bolas que no se estén usando. De esta forma, al menos, pisar una bola no será nunca la causa de una lesión en el tobillo.

Rodilla
La rodilla es una articulación susceptible de lesionarse. La articulación de la rodilla puede dañarse al retorcerse. En caso de torcedura, los ligamentos (cruzados) y el tejido del menisco pueden sufrir daños. La lesión en el menisco puede provocar hinchazón y quizá ya no sea posible flexionar y extender correctamente la rodilla. Una lesión grave en los ligamentos cruzados suele provocar una hemorragia interna o acumulación de fluidos. En ese caso, se siente hinchazón y calor en la rodilla, duele y deja de moverse bien. Cuando se produce una torcedura grave de rodilla, se suelen dañar tanto los ligamentos cruzados como el menisco interno. Si se sospecha de lesión de ligamentos cruzados, es importante que un médico deportivo o un fisioterapeuta deportivo realice el correcto diagnóstico. Durante la rehabilitación de una lesión de rodilla y después de ella puede merecer la pena proteger la rodilla (al hacer deporte) con una rodillera Push Sports.

Muñeca
Las lesiones de muñeca no son particularmente habituales en el hockey. Generalmente se producen como resultado de una caída. Dependiendo de la posición de la mano, los tejidos del interior y los alrededores de la articulación de la muñeca pueden verse hiperextendidos o hipercomprimidos. Como resultado del estiramiento el ligamento puede sufrir daños. La compresión fuerte puede dañar el cartílago del interior de la articulación de la muñeca. Como resultado del daño, puede haber hemorragia en la articulación. Esta hemorragia provoca dolor e hinchazón.
Llevar una muñequera Push Sports puede ayudar a estabilizar la muñeca, dándole al tejido dañado la oportunidad de recuperarse. También puede llevarse cuando no se está haciendo deporte, justo después de la lesión.

Dedo, pulgar, espinilla y muslo
Los dedos, los pulgares, las espinillas y los muslos pueden fácilmente sufrir contusiones durante la práctica del hockey, por contacto con un palo o con la bola. En general, la única consecuencia es ocasionalmente un hematoma considerable. Esto puede ser muy doloroso, pero se cura solo.
La espinilla se puede proteger llevando espinilleras. Además, en ciertas situaciones de juego, los guantes protectores y una máscara pueden prevenir lesiones.

Cara
Las lesiones faciales suelen parecer peores de lo que son, porque las heridas en la cara pueden sangrar mucho. Para evitar daños graves en los dientes se recomienda llevar protector bucal.

Isquiotibial
Las lesiones de isquiotibial son en general agudas. Tanto los desgarros musculares pequeños como los grandes necesitan tiempo para curarse. A menudo tardan seis semanas. La dificultad con los desgarros del isquiotibial es que dejan de notarse mucho antes. Sin embargo, en cuanto el deportista vuelve a esprintar al máximo de sus fuerzas, queda claro que la lesión no se había curado del todo. Entonces el tejido muscular debe volver a manejar una potencia excesiva. La curación del isquiotibial tarda seis semanas de verdad. La supervisión por parte de un fisioterapeuta deportivo o masajista deportivo experto puede prevenir este problema.

LESIONES COMPATIBLES

Lesión de rodilla

Knee injury

Lesión de rótula

Patella injury

Lesión de codo

Elbow injury

Lesión de pulgar

Thumb injury

Lesión de tobillo

Ankle injury

Lesión de muñeca

Wrist injury

PROVEEDORES OFICIALES Y PATROCINIOS

  • FIFPRO
  • logo-knkv-2020
  • logo-dutch-gymnastics-2020